Campañas de guerrilla: ¿Deben tener un límite?

Con gran sorpresa me encuentro con esta campaña de guerrilla que se está realizando en Madrid. La misma responde a una flamante compañía telefónica que -para diferenciarse de la competencia- decide acudir a la contratación de actores que simulan haberse clavado un cuchillo por las altas tarifas de las competidoras.

asesinados

Ahora bien me pregunto, ¿no debería existir -al igual que la publicidad tradicional- un tope gubernamental para este tipo de acciones? En mi opinión sí. Y cuanto antes. Sobretodo teniendo en cuenta el grado de violencia que utilizan. Imaginan acaso a varias empresas utilizando al mismo tiempo este tipo de acciones? Simplemente aberrante. Y ustedes, ¿qué opinan?

Vía | El País