la publicidad busca nuevas formas de reinventarse, y lo hace a través de las vías más creativas. Y en este caso no les hablo de anuncios en soportes clásicos cuya inspiración nos deja con la boca abierta, si no que hoy volvemos a los post en los que analizamos conceptos del mundo de la publicidad y del marketing, porque el protagonista del día es el branding art.
¿Qué es el Branding-Art?
Pues se trata del uso por parte del marketing del arte para sorprender al consumidor con una acción creativa, a medio camino entre la persuasión y la contemplación de una obra maestra. Nos encontramos diferentes modos de utilizarlo, los cuáles pasan desde una escultura con fines publicitarios, a acciones más concretas como pueden ser museos propios o apuestas por incluirse en lugares más turísticos con una propia interpretación de lo que es el arte por parte de la marca.
El fin último del branding-art es sorprender al consumidor dándole lo que nos está pidiendo, al tiempo que la filosofía de la marca se abre hasta el punto de reinventarse a sí misma. Aunque cabe decir que no es sencillo apostar por esta nueva técnica ya que hay que obtener una popularidad elevada antes de poder utilizarla para obtener beneficios. Es decir, que vamos a ver como a marcas como Coca-Cola, Absolut, o Apple les sale muy bien, pero a brands más tradicionales les cuesta mucho alcanzarlo.