Es bastante habitual que las marcas que poseen productos con precios superiores a otros muy similares en el mercado busquen defender el motivo de ese precio más alto. Es un caso que hemos podido observar en el caso de las pilas, de los lavavajillas e, incluso, del papel higiénico. La idea que buscan transmitir no es otra que aunque la inversión inicial para la adquisición del producto sea mayor a la larga se obtiene más rentabilidad gracias a su más elevada vida útil.
Zippo se une a esta línea comunicativa en la campaña gráfica que os muestro a continuación:
En la imagen se observa como gran cantidad de mecheros de los más normales se han convertido en basura mientras Zippo sigue con su llama encendida. La idea no es mala, sin embargo, creo que es un cambio en el posicionamiento de esta marca de encendedores demasiado radical. En mi opinión, Zippo siempre ha sido imagen de calidad e, incluso, de excelencia. Con esta nueva línea comunicativa creo que esos rasgos dejan de estar tan presentes en la marca. Tal vez haya sido una decisión necesaria ante la época de crisis en la que nos encontramos (en el caso de que las gráficas sean actuales claro).
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