La receta del street marketing para la crisis publicitaria

La publicidad se ha adaptado a la crisis, tanto en lo que se refiere a las inversiones económicas, a los gastos de producción, a los medios técnicos empleados para la difusión, como con el anonimato impuesto para las caras visibles de las marcas.

Nunca ha resultado tan poco rentable el brillo de una estrella, como demostró la repetición del último spot de Freixenet en las pasadas navidades o, como viene siendo habitual ahora, la reactualización de viejas fórmulas del marketing más sencillo, pero con potencial.

Todo, cuando los niveles de inversión publicitaria se recuperan de manera exasperadamente lenta. Domina la economía de guerra en el marketing actual. Se imponen estrategias de marketing de guerrilla para cuadrar impacto con resupuestos de corsé. Creo en aquella expresión que decía ‘a vacas flacas, ideas gordas’.

Ahora viene funcionando aceptablemente el street marketing. Una idea que nunca ha sido nueva, sólo se renueva. El street marketing es una puesta en escena en la que una marca sale a la calle y se hace visible e intenta involucrar a los potenciales usuarios en espacios comerciales muy concurridos.

Y como muestra, el botón de YouTube. Traigo aquí un vídeo que puede hacer comprender como se mueve en corto la publicidad de tiempos de crisis por nuestras calles. Entre la gente. El street marketing como receta para la crisis publicitaria.