Ya nos hemos referido varias veces a la eficacia con que puede contar un determinado anuncio publicitario, desde la síntesis e inmediatez de una gráfica por ejemplo. Y también les he hablado sobre la infalibilidad con que algunos creativos emplean los recursos materiales cotidianos, para dar más peso o fuerza al mensaje. Pues éste es un clarísimo ejemplo tanto de eficacia como de infalibilidad, siendo no más que una pajilla o popote (depende desde dónde me lean) que ha asistido a un centro de Yoga, ¡y a salido más que elástica!
