Ya sabes que no m gusta nada la publicidad repetitiva. Y con ella me refiero al tema que tocábamos ayer con respecto al sector de la cosmética en el que parece que cualquier anuncio gráfico tiene que seguir la estructura de centrarse en el producto y optar por una campaña demostrativa; es decir, que nos enseñe a usarlos o los beneficios que nos aportan. Y no es que haya de malo en ese tipo de publicidad, pero cuando todos lo hacen, al lector le acabamos produciendo un aburrimiento insoportable.
Pero como suele decir el refrán, no hay mal que por bien no venga y en este caso nos encontramos con una campaña de anuncios de risa contra la calvicie, con los cuales la verdad es que no puedo decir que me haya aburrido, aunque hay que reconocer que están un poco subidos de tono. Aunque si tengo que elegir entre publicidad un poco fuera de norma, y publicidad aburrida, me quedo claramente con la primera. ¡Ni punto de comparación!
Claro que esta publicidad probablemente no pueda ir en cualquier revista, y tenga un público muy específico. Pero pongamos por caso las publicaciones dirigidas en exclusiva a los hombres con temática para adultos que pueden ser tan distintas como las de informática, coches, o opciones más generalistas ¿No encajaría a la perfección?
Desde luego creo que es mucho más fácil convencerles de que prueben el nuevo champú para tratar la calvicie con un poco de buen humor que con el clásico chico guapo mirándose al espejo o con el futbolista de moda que se pone el producto en el suyo ¿O no?
