Hoy volvemos a hablar del mundo de la publicidad y sus diferentes formatos y lo hacemos con un concepto que no todo el mundo conoce por el nombre, aunque todos lo han visto alguna vez. ¿Se han fijado por ejemplo en que muchas marcas fabrican objetos que nada tienen que ver con ellas, pero que los venden? Por ejemplo, Coca Cola crea casi todo tipo de gadgets, y bien los usa de manera promocional, regalándolos en alguna promoción, o los vende en su página oficial.
Precisamente ese es el concepto del brand merchandising. Es decir, una empresa crea sus propios objetos, les pone el nombre de su marca y saca partido de ellos. Pero claro, nadie querría ponerse una camiseta que pusiese Moda Pepa, pero si pagaría por llevar la del último diseño en el que se inspiró Coca Cola. Es decir, que hay gente que paga por esos objetos porque tienen la marca asociada, es la marca la que les da el valor.
Entonces, ¿qué sentido tiene el brand merchandising? Pues básicamente es una manera no solo de obtener un dinero extra, si es que esos objetos se venden, o de mejorar la imagen en el consumidor a través de promociones en los que se regalan; es también una forma de obtener notoriedad de marca. Si un consumidor tiene una camiseta con el logotipo, de seguro que recordará mucho mejor esa marca que a cualquier otra. Pero claro, no todos pueden hacer brand merchandising, al menos con éxito, ya que hay que tener cierta reputación en el mercado.
